lunes, 30 de enero de 2017

Un invierno frío

Empezando febrero parece que el tiempo quiere aflojar, confío que no sea así.  El futuro de la viña, su correcto desarrollo, necesita días fríos en invierno.  Este, y la nieve, son muy beneficiosos. 

La hibernación invernal, el periodo de descanso o dormancia supone la retirada de la savia hacia las partes subterráneas de la planta, tronco y raíces.  Algunos hongos e insectos agazapados en la corteza son susceptibles al frío, que puede diezmarlos y disminuir sus ataques en primavera.

¿Cuánto frío? Con la excepción de las heladas tardías, que sí son peligrosas, las cepas tienen unos buenos umbrales de tolerancia a las bajas  temperaturas.   Resisten heladas puntuales de hasta -12º y -15 º o incluso más, dependiendo de su edad y de las condiciones de la helada (nieve, etc…)



Para conjurar los fríos nada mejor la  tórrida cadencia de un son cubano.  Uno bien famoso: Lágrimas negras, compuesto en 1929 por Miguel Matamoros, fundador del trío homónimo.  Un bolero rescatado en hace unos años por Diego el Cigala y Bebo Valdés en una versión archifamosa  que rizaba el rizo de otras voces no menos conocidas, como las de Compay Segundo a dúo con Cesária Évora, Sara Montiel, Celia Cruz, Olga Guillot, María Dolores Pradera, la Vieja Trova Santiaguera, la Orquesta Aragón, José Feliciano, Chucho Valdés, Rubén Blades o Oscar Chávez entre otros..


Yo he elegido esta versión crepuscular del guitarrista Eliades Ochoa,acompañando a Omara Portuondo.  Mayorcitos, sí, pero pletóricos de swing y poderío…


miércoles, 25 de enero de 2017

Bendita nevada

La viña necesita inviernos fríos.  Si además vienen con nieve ... miel sobre hojuelas!


La nieve es un desinfectante e insecticida natural.  Aporta agua sin escorrentía, completando las lluvias del otoño. Esponja el suelo con resultados similares a los de una reja... Y tiene la virtud de remontarnos a la alegría gratuita de la infancia.  ¿Quién da más?


Con estos últimos otoño e invierno se anuncia una primavera feroz.  Como cantan los delinqüentes: una auténtica primavera trompetera...




sábado, 7 de enero de 2017

¿Quién lo dijo? Enero 2017

El vino predispone los ánimos y los dota para el amor: la preocupación desaparece y se disipa por el efecto del abundante vino.  Entonces llegan las risas, entonces el que no lo es se vuelve atrevido, entonces el dolor y las preocupaciones y los ceños fruncidos se esfuman.

El fragmento forma parte del Ars amatoria, del poeta romano Ovidio, nacido en el año 43 a. C.    Escrito en latín, consta de tres libros o cantos en los que se ofrecen una serie de recomendaciones sobre las relaciones amorosas: dónde encontrar mujeres, cómo cortejarlas, cómo conquistarlas, cómo mantener el amor, cómo recuperarlo, cómo evitar que nos lo roben, etc.



Ese carácter didáctico del poema, camaradas vinateros aún en edad de esta clase preocupaciones, téngase muy en cuenta.  El efecto del vino sobre el estado de ánimo preamatorio:  pero cuanto sabían los clásicos!

Entonces la ingenuidad, rarísima en nuestra época, abre su mente merced al dios que rompe los encorsetamientos...


viernes, 6 de enero de 2017

un año entero...

...sin escribir una palabra! Estoy en el buen camino...

Si la última entrada fue con música, que suene también en la reentré.

Al efecto encuentro sin buscar mucho una canción menor de Simon and Garfunkel de 1970, incluida en el álbum célebre Bridge Over Troubled Water.  Si se sobrevuela el buenrrollismo propio del momento y autor, se encuentra uno una pieza de maravillosa sencillez acústica, donde el juego de las voces y el carácter alado de su melodía la convierten en una estupenda canción que siempre place volver a escuchar.

Pues eso, que here is my song for the asking...