y beso arena y fruto y desatino,
y el antiguo racimo atormentado
es como un corazón dentro del vino.
Celia Viñas Olivella fue una escritora leridana que escribió poesía, sobretodo infantil, en español y catalán. Con una obra breve (murió joven, en 1954, sin cumplir los 40 años).
Llegó a Almería en 1943, tras obtener la Cátedra de Lengua y Literatura con el número 1, según informa la wikipedia, y se encontró con una ciudad provinciana, que sufría las consecuencias de la posguerra, sin universidad y sin vida cultural. La situación de la ciudad andaluza, lejos de desanimarla, supuso un estímulo que la incitó a ser ella quien promoviese distintas actividades que dieron a Almería un brillo sin precedentes que lamentablemente no se mantuvo tras su desaparición.
La crítica ha escrito: "Los poemas breves de Celia
Viñas son ricos en imágenes y colorido, unen lo culto y lo popular, son
intimistas y descriptivos, manifiestan ternura y conjugan espontaneidad,
sonoridad y sencillez".
Los versos que han encabezado este blog durante las últimas
semanas forman parte de un hermoso soneto llamado El vino en la boca. Otra vez poesía y vino juntos. Otra vez una lírica cata de amor…
Y ahora ya en la boca enamorado,
ya en la lengua y paladar esposo fino,
detiene tu frescoe enmascarado
buscando mi garganta de camino.
Y bebo tierra y cielo y llama y prado,
y beso arena y fruto y desatino,
y el antiguo racimo atormentado
es como un corazón dentro del vino.
Dentro del vino, amor, para besarte,
dentro del vino, amor, para quererte,
en el vino, mi amor, para esa herida,
-¡ay saeta de luz!- de parte a parte
garganta, corazón, entraña fuerte,
en el vino, mi amor, para ser vida.
Mi padre solía citar cuando nos sentábamos a la mesa una frase que el cura les dijo durante la ceremonia de la boda, y que era algo así como:
ResponderEliminarQué en vuestro hogar nunca falte el vino del amor.
Yo procuro seguirlo a “rajatabla”, en mi casa siempre hay vino.
Beñi, iba a decirte "que sabio, tu padre...", pero pensándolo bien creo que el sabio eres tú por seguir el consejo curil "a rajatabla".
ResponderEliminarAdemás, creo que amor tampoco te ha faltado ¿verdad, canalla?