Después del largo y seco semestre (ni una gota entre marzo y septiembre de 2012) el otoño abre el año hidrológico con la ansiada lluvia que, hasta el momento ha caído mansa y abundante sobre mi reseco pais. Las lluvias de final de septiembre, las mismas que produjeron graves inundaciones en la zona de Lorca y Puerto Lumbreras, dejaron aquí 110 litros de agua bendita. Las de la semana pasada 60 l/m2 y las de este fin de semana unos 10 litros , siempre según el observatorio meteorológico de mi tía Pepita.
El caso es que la bendita lluvia no solo tiene las consabidas consecuencias benéficas sobre la agricultura. Como efecto atractivo y colateral, se produce un reverdecimiento de la campiña, avivado por la efímera hierba de otoño, que los hielos arrasarán, y que vuelve a dar al paisaje un aire norteño, casi primaveral, que me gusta tanto...
Fondo de pantalla de garza azulada y cigüeñuela cuellinegro en Savannah National Wildlife Refuge.
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La garza azulada, Great blue Heron (Ardea herodias), con sus 97-137 cm de
longitud y 2,1-2,5 kg de peso es la garza de mayor tamaño de Norteamérica.
El p...
Hace 2 días